Revelando el misterio del origen humano

La Expedición Dan David intentará descubrir los restos más antiguos del Homo Sapiens, el predecesor común de todos los seres humanos.

Desde el descubrimiento de un cráneo humano de 160,000 años de edad en Etiopía, en 2002, los científicos están reconsiderando su interés en cuestiones relacionadas con la evolución del Homo Sapiens. ¿Cuándo y dónde aparecieron los seres humanos modernos y cuáles fueron sus rutas de dispersión en el mundo?

La única manera de responder a esta pregunta es descubrir restos humanos en capas arqueológicas más antiguas que las de Etiopía, de hasta 200,000 años de antigüedad, lo cual no ha sido logrado con certeza hasta el presente. Gracias a una asignación del Fondo Dan David, una iniciativa del Sr. Dan David, Doctor Honoris Causa de la UTA y fundador del Premio Dan David, administrado por la UTA, se ha hecho posible el inicio de un proyecto en el norte de Israel destinado a descubrir los restos de Homo Sapiens más antiguo fuera de Africa.

Las excavaciones serán llevadas a cabo durante cuatro años en la cueva Misliya, en el monte Carmel, por el Prof. Israel Hershkovitz, paleoantropólogo de la UTA, con la colaboración de la arqueóloga Prof. Mina Weinstein-Evron, de la Universidad de Haifa. El Prof. Hershkovitz es titular de la Cátedra Tassia y Dr. Joseph Meychan de Historia y Filosofía de la Medicina, en la Facultad Sackler de Medicina

El descubrimiento de un tesoro arqueológico

En las excavaciones realizadas en el monte Carmel hace alrededor de 70 años fueron descubiertos restos humanos de más de 100,000 años. «La cueva Misliya, que aún no fue explorada, contiene capas prehistóricas de cuatro metros de profundidad y de 500,000 años de antigüedad», dice Hershkovitz. El techo de la cueva colapsó, lo cual ayudó a proteger los sedimentos de los efectos de la erosión durante miles de años.

Las excavaciones preliminares en el sitio han proporcionado huesos de animales, un fragmento de una mandíbula humana antigua con dientes intactos, y el hueso de un dedo humano.

Hershkovitz sostiene que los cráneos de 160,000 años descubiertos en Etiopía se encuentran en el umbral de la anatomía moderna pero no son completamente humanos modernos, debido a lo cual fueron atribuidos a una nueva subespecie: Homo Sapiens Idaltu. Se trata de cráneos anatómicamente diferentes a los del Homo Sapiens moderno encontrados en Israel, de 100,000 años de antigüedad.

Pasión por la paleoantropología

El interés de Dan David en el proyecto comenzó durante una visita que realizó con el Prof. Herhskovitz y el Prof. Michel Brunet, de Francia, laureado con el Premio Dan David 2003 en reconocimiento a su descubrimiento, en 2002, del cráneo humano más antiguo conocido, de 7 millones de años de edad.

Para Dan David, el campo de la paleoantropología es una pasión intelectual, al margen de poseer grandes conocimientos sobre la materia, dice el Prof. Hershkovitz. Después de haberse interiorizado en los detalles del potencial de la cueva de revelar restos humanos antiguos, y de la importancia de la investigación paleoantropológica en Israel, ofreció la asistencia de la Fundación Dan David para apoyar el proyecto.

Los análisis de DNA indican que el Homo Sapiens más antiguo podría remontarse a unos 250,000 años, indica el Prof. Hershkovitz. «Si encontramos fragmentos de esa edad en Misliya, contaremos con información histórica importante sobre el Homo Sapiens y sobre el desarrollo evolutivo, cultura y genético de las especies más antiguas, incluyendo las rutas de sus migraciones. También pondremos a Israel en una situación de privilegio como uno de los principales centros de investigación de paleontología a nivel mundial», asegura.